Márquez ha (casi) convencido a la afición italiana: de la furia de Misano 2019 a la bandera de Mugello

No hay paz entre Marc Márquez y el público italiano. En Mugello, se escucharon varios abucheos hacia el español, dominador absoluto del GP de Italia entre la clasificación, el sprint y la carrera. Muchos aficionados recuerdan la disputa con Valentino Rossi incluso 10 años después de aquel turbulento Campeonato Mundial de MotoGP, sin que el piloto de Ducati haya tenido la más mínima oportunidad de redimirse. Sin embargo, algo parece haber cambiado. Por un lado, como admitió Márquez, la intensidad de las protestas ha disminuido en comparación con otros años. Por otro lado, sin embargo, es el propio Marc quien ha cambiado de actitud.
No es la primera vez que el español triunfa en Italia tras la ruptura total con Rossi. Además de su última victoria en Mugello, el ocho veces campeón del mundo ha conseguido tres victorias en Misano. Y fue en la pista de Romaña, en 2019, donde Márquez protagonizó un estallido sensacional. Abucheado ruidosamente durante todo el GP de San Marino, incluidos los entrenamientos, un nervioso Marc discutió con Valentino durante la clasificación, lo que aumentó la tensión. En carrera, el español de Honda derrotó a Fabio Quartararo tras un duelo espectacular en la última vuelta y, una vez en el parque cerrado, bajo el podio, desató una exultación feroz, nunca antes vista en el campeón catalán. Gritando de alegría, Márquez señaló al suelo varias veces, como para subrayar que había ganado en un contexto hostil, en la guarida de un enemigo. Marc justificó su estruendosa celebración diciendo que venía de dos carreras perdidas en la última curva, pero admitió: “El episodio con Valentino me dio un empujón extra”.
La mirada atormentada de Márquez en 2019 es un lejano recuerdo al pensar en lo que vio el domingo en Mugello. El español podría haber celebrado su victoria número 93 jugando con su propia placa de la parrilla. Pero no, Marc tuvo una idea para la afición de Ducati: la sorprendente idea de plantar la bandera de la marca de Bolonia justo delante de la afición italiana. Un gesto motivado por el vínculo que Márquez ha forjado con Ducati. Pero la actitud de Marc también es diferente, como se desprende de las declaraciones a Mundo Deportivo: "No hay necesidad de provocar. Es mejor hablar en la pista y dar el 100% allí".
La Gazzetta dello Sport