Todos los conductores deberán llevar un objeto en su coche este fin de semana para evitar muchos accidentes.

Con el aumento de las temperaturas y el sol brillando en gran parte de Francia, se avecina un peligro para los conductores, quienes deben extremar la precaución en la carretera. Este fin de semana en particular, conviene tener en cuenta varias recomendaciones antes de salir a la carretera y no olvidar ciertos artículos esenciales. Llevar agua cerca en una botella o cantimplora es de sentido común, pero no es el único pequeño detalle que no se debe olvidar al volante...
Además de los peligros bien conocidos del calor, como averías mecánicas, problemas con el aire acondicionado y mayor fatiga, otro riesgo a menudo pasado por alto amenaza a los conductores: el deslumbramiento. Sin embargo, causa numerosos accidentes cada año.
Ante esta observación, las autoridades y expertos del sector automovilístico nos recuerdan regularmente una norma de seguridad esencial con la llegada del verano: llevar gafas de sol no solo está permitido al volante, ¡sino que incluso es muy recomendable! Llevarlas en estas condiciones de extrema luminosidad parece obligatorio, tanto por comodidad como por seguridad al volante. En 2022, la gendarmería de Gard incluso dio la voz de alarma tras varios accidentes, incluido uno mortal, probablemente causados por el deslumbramiento del conductor.

Ante este peligro, las gafas de sol son tu mejor aliado. Algunos consejos pueden ser invaluables, como usar gafas de sol diseñadas específicamente para conducir. Si son demasiado oscuras o demasiado coloridas, podrían impedirte percibir correctamente cierta información esencial.
Otro recordatorio: si usa gafas y así lo indica su carnet de conducir, sus gafas de sol deben ser adecuadas para su visión. Incumplir esta norma podría resultar en una multa de 135 € y la pérdida de tres puntos en su carnet de conducir.
La buena noticia es que las gafas de sol no son la única protección contra el deslumbramiento. Los parasoles de todos los coches, tanto para el conductor como para el pasajero, no son un simple accesorio. Cuando hay sol, la visión puede verse afectada por los reflejos en el parabrisas o el salpicadero. No deje nada visible en el salpicadero, especialmente vasos, botellas, mapas o papeles, ya que pueden ser una fuente de deslumbramiento. Esto puede retrasar el tiempo de reacción y, por lo tanto, aumentar el riesgo de accidente.
Por último, si se siente incómodo al volante debido al deslumbramiento excesivo o la mala visibilidad, es mejor reducir la velocidad. Adaptar la velocidad al clima no solo es importante en invierno, especialmente cuando nieva o llueve a cántaros; el sol también puede ser un peligro en la carretera. A la menor molestia, reduzca la velocidad y esté especialmente atento. Si le cuesta acostumbrarse a la vista, no dude en detenerse unos minutos para descansar. Su seguridad y la de los demás usuarios de la vía dependen de ello...
L'Internaute