¿Qué pasa si se apaga el coche con el aire acondicionado encendido?

El aire acondicionado del coche es un elemento indispensable en los meses de verano, y es que la gran mayoría de conductores en toda España utiliza el sistema de climatización mientras circula por la carretera en la temporada estival. A pesar de que este componente sea vital para poder conducir de manera cómoda en los días en los que el calor es más asfixiante, la realidad es que si no se usa adecuadamente, podría acarrear más de un problema en el automóvil.

El correcto uso del aire acondicionado en el coche es uno de los factores más importantes a la hora de conducir en verano, ya que aunque muchos crean que lo ideal es dejarlo puesto el máximo tiempo posible, hay pequeños gestos que pueden suponer una gran diferencia. Uno de ellos es apagar el coche sin haber hecho lo propio con el climatizador, y es que esta acción es bastante perjudicial tanto para la propia mecánica del automóvil como incluso para la salud de sus ocupantes.

En el aspecto mecánico, apagar el coche teniendo el aire acondicionado encendido puede afectar (y mucho) a la batería del coche, ya que el sistema de climatización consume mucha energía, lo que a su vez hace que la vida útil del acumulador se reduzca. De esta manera, lo ideal es quitarlo unos minutos antes de detener por completo el vehículo, ya que así la temperatura del habitáculo se conservará y se evitará un grave problema en ese elemento del automóvil.

Además, y aunque muchos conductores no lo crean, dejar el aire acondicionado encendido una vez se ha apagado el coche también puede acarrear problemas de salud, ya que es posible que se acumule la humedad en los conductos de ventilación, lo que a su vez podría producir corrosión y moho en los canales de climatización. Esto, a la postre, es muy nocivo para todos los pasajeros que viajan en el automóvil, y por ello es vital apagar el sistema antes de parar el vehículo.

Conducir durante el máximo tiempo posible con el aire acondicionado encendido es muy tentador en los días en los que las altas temperaturas del verano causan más estragos, pero lo cierto es que hacerlo es bastante más peligroso de lo que muchos creen. Si el refrigerador del vehículo sigue funcionando incluso con el motor parado, lo más probable es que se tenga que realizar una visita al taller en un futuro próximo.

Por lo tanto, es fundamental que los conductores apaguen el aire acondicionado unos minutos antes de parar el motor del coche este verano, ya que aunque pueda parecer una acción nimia que no tiene consecuencias, la realidad es que ese pequeño gesto puede aumentar la duración de la batería del automóvil e incluso evitar futuros problemas de salud para los que viajan en él.