Lleva su Mercedes AMG GT al taller por varios problemas en los sensores y se arreglan de la forma más extraña posible

Los coches pueden tener problemas mecánicos. Al fin y al cabo, ninguna máquina es perfecta, y los automóviles son una excepción. Pero que suceda en un supercoche que cuesta cientos de miles de euros da mucha más rabia.

Es en estos casos cuando hay que acudir a un taller especializado, para que puedan arreglar los problemas que tenga. Sin embargo, hay ocasiones en las que ni ellos mismos saben lo que le pasa al coche.

Eso es lo que le ha sucedido a un youtuber conocido como Chris Slix. Este chico adquirió un Mercedes AMG GT con varios elementos rotos para poder arreglarlos. Cuando parecía que estaba ya todo bien, surgió otro problema: los sensores.

En el cuadro de mandos parpadeaban el del asistente para prevenir las colisiones, el del sensor del aparcamiento y el de fallo del motor. Entonces le quitó la parrilla frontal y lo llevó a un concesionario de la marca alemana.

Un viaje de ida y vuelta a casa con resultados sorprendentes

Sin embargo, lo más sorprendente sucedió al volver a su casa. Decidió no dejar el vehículo en el taller y retornó a su hogar. Entonces todos los problemas habían desaparecido de manera repentina. Muchos en los comentarios aluden a que el logo estaba tapando los sensores, y al quitar la parrilla lo había solucionado.